REVELACIONES CHÚCARAS

Sorry, no puedo evitarlo, aun a riesgo de quedar como un pedante y clasista.

Aeropuerto Arturo Merini Benítez - Santiago - 11:40 AM. La gente intenta salir luego de retirar sus maletas y pasar por aduana. A la cantidad de gente que intenta avanzar por un estrecho pasadizo, se suma un grupo de taxistas y choferes que hacen como que esperan gente, pero en realidad sólo conversan entre ellos, comparten videos con obsenidades y chistes malos a través de sus celulares. Ellos utilizan gran parte del pasillo de tránsito de pasajeros, se molestan si algún extranjero tímido le pide el paso, mirándolos con cara de pocos amigos y se sienten dueños del espacio que ocupan, porque seguramente pasan gran parte del día ahí no haciendo mucho más que comportarse como una comadres en pleno cacareo.

Ese es el tipo de especímenes que recibe al amigo cuando es forastero. Tipos prepotentes, indolentes y seguramente frustrados domésticamente que ejercer el poder que no tienen con sus risas estremecedoras y sus peinados pokengominados. Lucen orgullosos sus celulares de última generación que tienen cámara, pantalla de millones de colores, bluetooth y dos lucas que le quedan de salgo en la tarjeta de prepago.

La salida de la aduana de chilenos y extranjeros en el aeropuerto pudahuel es la rasquería misma. Los carabineros que circulan de vez en cuando por la zona de salidas no tienen ni la más mínima intención de ordenar la cosa. Ellos son los amos y señores del espacio y no hay quién les haga contrapeso (sobre todo por la obesidad que muestran la mayoría que no parece un pelele). No se dan cuenta en nuestro principal aeropuerto, que podrán poner lindas fotos de los destinos turísticos de Chile. Podrán construir modernos hoteles que están a sólo pasos del lugar. Podrán agrandar y agrandar, poner y poner pistas, comprar y comprar aviones, pero mientras la gente no cambie, seguirá siendo la misma picantería de siempre.

De nuevo, mis disculpas, pero hoy amanecí con la rabieta. - foto_mía

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