REVELACIONES CHÚCARAS

Y finalmente fuimos el jueves pasado con mi ahijado a ver la bendita película. Yo que pretendía que fuera una sorpresa cuando lo fuera a buscar despué sdel colegio para llevarlo al cine, pero él se acordaba que hace meses le prometí que lo llevaría al estreno, al menos estaba cumpliendo mi palabra.

Poca gente en la función de tarde-noche, quizás demasiado padre en el trabajo y pocos tíos buena onda que lleven a los nenes a cine más cercano, pero ahí estábamos, con el balde de cabritas de rigor -que era más grande que mi propio sobrino- y sendos vasos agrandados de coca light. Todo listo y dispuesto para las aventuras de Triviño, Bodoque & Cia.

Ya lo dijeron por ahí (y supongo que habrá sido con conocimiento de causa). Puede que estemos ante la mejor película infantil que ha dado a luz el cine chileno. Y es que al menos yo me reí muchísimo, incluso cuando nadie lo hacía y sé que mi sobrino también se divirtió mucho porque disfrutada cada idiotez con que salían estos títeres, de los que es fanático a morir, al punto que desea inventar su propio personaje para ofrecérselo a la dupla Diaz-Peirano.

31 Minutos, La Película (2008) es una cina de gran facción técnica, sobre todo para quienes somos verdaderamente concientes de cómo se hacen este tipo de películas (y me refiero a gente que pasa no poca parte de la grabación con la espalda encorvada y falseando su propia voz, una empresa nada de fácil). A eso se le suma un guión simple y efectivo (no así simplón ni efectista) donde uno extraña más intervenciones musicales pero agradece la creatividad con que los personajes de la serie sorprenden a grandes y chicos (porque hay chistes para ambos).

Una buena experiencia de cine, que estará lejos de aburrir a padres o tíos y que seguramente divertirá hasta el hartazgo a la cabrería que se acerque a los cines. Buenísimo panorama para ver algo distinto en una cartelera tradicional que adolece de sorpresas. - trailer - wiki.

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