Ojo con el comercial más caro de la historia. Fue emitido ayer y fue creado por la agencia inglesa AMV BBDO para su cliente Guinness (la cerveza) que cumple 80 años. La gracia costó casi 22 millones de dólares. Fue filmado en Iruya, provincia argentina de Salta y se utilizaron 6.000 fichas de dómino, 10.000 libros, 400 neumáticos, 50 refrigeradores, 45 closets y 6 autos. Tardaron 15 minutos en filmarlo y el spot dura un minuto y medio. Véanlo.
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