REVELACIONES CHÚCARAS

Otro de esos temas eternos en los que difícilmente nos pondremos de acuerdo. Hoy se publica una carta a propósito del tema del voto de los chilenos en el extranjero, tema sobre el comenté un par de cosas hace un tiempo.

Según quien publica y ante la pública intención del Gobierno de reponer el proyecto de ley en un años más, de cara a dicha discusión habría que analizar "cuáles son las condiciones implícitas en el elector para hacer uso de un sufragio que afectará el ámbito político del país."

Una vez más se recurre al argumento de que los chilenos que residen en el extranjero no debieran votar en las elecciones de su país, por cuanto las decisiones que toman no les afectarían y por otra parte, adolecen del vínculo necesario con Chile como para votar informados y conscientes de las consecuencias de sus decisiones.

La autora de la carta considera que el chileno que vive afuera "carece del arraigo necesario en su territorio y del conocimiento del día a día del acontecer nacional y de los diversos cambios que ha tenido Chile desde su partida. En él existe, pues, un vacío de la realidad-país que ningún medio informativo puede suplir. Menos aún sabe de los criterios políticos y de las soluciones a los problemas nacionales de los candidatos designados para ocupar cargos de elección popular. En tal caso, su voto carece de bases sustentables y es inválido en sí mismo".

Con esa manía que tenemos en este país de someter todo a pruebas, mediciones, hacer rankings y clasificaciones, podría uno entender que el problema quedaría resuelto con un especie de test de actualidad nacional e información sobre los candidatos, para que quien posee rut chileno y vive en el extranjero pudiese sufragar válidamente.

Sin embargo, creo que el argumento no tiene toda la solidez que algunos quisieran encontrar. Tal como reza el dicho, la caridad parte por casa, no creo que fuera bien visto el que cada uno de los chilenos que tenemos derecho a voto y vivimos en el país, tuviéramos que someternos a una prueba nacional de actualidad para saber si no carecemos del arraigo y conocimiento que la autora de la carta considera condiciones implícitas para ejercer un derecho constitucional como es el del voto. Sería completamente absurdo.

Quienes han querido vincular el derecho a voto con el pago de impuestos a través del famoso slogan gringo No Taxation Without Representation, quienes pretenden condicionarlos a conocimientos sobre actualidad nacional, política y económica, y quienes ven en el hecho de que un chileno resida fuera de los límites físicos del país, desarraigo, poco compromiso patrio y desinterés por la ciudadanía que aun poseen, olvidan que el derecho a voto es un derecho político anterior a las políticas tributarias (de hecho existen muchos chilenos que votan y que en su vida han pagado un impuesto, salvo el que afecta a los bienes de consumo y que muchos chilenos pagan sin por ellos "ganar" el derecho a sufragar); tampoco puede condicionársele a un nivel cultural y educacional que le permita al votante estar debidamente informado (sería ideal que todos estuviéramos al día en cuanto a actualidad nacional, así como que todos supiéramos leer, pero no resulta sino anacrónico y arbitrario siquiera esbozar tales medidas elitistas); y finalmente no puede pretenderse subordinar el derecho a voto a un especie de nivel de compromiso patrio u otras manifestaciones de arraigo con olores nacionalistas e intereses ideológicos (basta leer el remate final de la carta comentada), cuando la realidad demuestra que muchos de nuestros compatriotas que viven en el exterior bailan cueca -y no cumbia ni regeaton- en las fiestas patrias, y cantan con más fuerza el himno patrio que me atrevo a decir, muchos chilenos aun desconocen.

Insistir en vestir con halos de legitimidad y aparente lógica jurídica una medida discriminatoria que ha privado a cientos de miles de chilenos de ejercer un derecho que les es propio por el hecho de ser chilenos, me parece un despropósito que demuestra el nivel de cálculo político y resentimiento de quienes se esfuerzan porque "demos vuelta la página", cuando son ellos mismos los que siempre han creído que en Chile y en el mundo hay chilenos de primera y otros de segunda categoría. - foto_niconectado.

Etiquetas: nacional, política