REVELACIONES CHÚCARAS

Bueno, dicen que el que la sigue la consigue y Tomás consiguió meterme en el debate que se esforzaba porque sostuvieramos entre quienes visitan esta bitácora. El tema es archi repetido y a pesar de que el caballero esté por ponerse el pijama de palo, da un cansancio el sólo pensar en ponerse a hablar de esto. Pero como dijo Daniel, el tema es que sorprende que aun haya gente que piense como piensa y esté dispuesta a ponerse en la vereda de los que apoyan y juran lealtad a quien fuera y es uno de los personajes más oscuros de nuestra historia nacional.

Como soy fosforito a veces, piqué y aquí me tienen tratando poner las cosas en su lugar, o más bien, en el lugar que creo que deben estar. Evidentemente Tomás no estará de acuerdo conmigo, pero lo interesante será la cadena argumentativa y los comentarios viscerales de nuestros feligreses que seguramente le darán sazón al tema.

Tomás dice que tiene "la peor opinión de los organismos de seguridad de la época" como si ellos no hubiesen dependido directamente de Pinochet. No se puede tirarle la pelota tan fácilmente a los humanoides que estaban en esos organismos, cuando la verticalidad de mando es evidente (es cosa de revisar decretos de la época que son públicos, aunque claro, memos en que se manda a matar a alguien firmados por Pinochet no hay, pero nos estaríamos pasando de ingenuos).

A Pinochet no sólo le cabe una responsabilidad política por lo sucedido en su mandato -la que mal que mal aceptó en su última carta, pero que como tu bien sabrás, esa responsabilidad pesa menos que un paquete de cabritas-. Lo que le cabe a Pinochet es responsabilidad penal por los crímenes que ordenó, financió y ocultó. Y eso en derecho tiene tres figuras muy claras, autor, cómplice y encubridor. Pero no sólo eso, le cabe ahora también responsabilidad civil y tributaria. Osea estamos hasta las polainas. Responsabilidades le sobran al viejo, así que no ahorremos en palabras y menos en una tan fútil como la responsabilidad política.

Que el poder no es para darse "gustitos personales". Por favor! A estas alturas dudo que haya alguien que no tenga claro que lejos de estadista, Pinochet fue un tipo ambicioso, que se subió a última hora al golpe, traicionó la confianza que el Presidente de Chile le había dado y la lealtad que él había jurado. No trepidó en hacerse del poder total auto invistiéndose de Presidente y no contento con eso y sin arrugarse se ungió como candidato único para el plebiscito del 88. Osea si eso no es para perpetuarse en el poder, y en el poder absoluto, entonces estamos hablando de personas distintas. Lo de los gustitos. Bueno Tomás, me concederás que lo del Riggs no son voladores de luces, y las varias propiedades que tiene el caballero no son de cartón. Si esos no son gustitos... osea. Que los negocios de armas y los enredos en los que estuvo metido su hijo Marco Antonio. Es decir, Pinochet está lejos de ser un tipo probo.

De ahí que no merezca ningún honor de Estado, salvo el que privadamente pueda darle el Ejercito como ex comandante en jefe. Pero el Estado (no el Gobierno) no tiene por qué darle honores a un tipo con ese prontuario, por mucho que no haya condenas (pero hay procesamientos, es decir, presunciones fundadas de participación en delitos que pueden no llegar a convertirse en sentencia por infartos al miocardio y edemas pulmonares), tiene antecedentes suficientes para no merecer lo honores de ningún tipo.

Me vas a perdonar. Yo no soy un fan de la Gladys Marín ni nada. La encontraba una tipa trabajadora, consecuente y luchadora, pero que yo sepa no robó, no estafó, no mandó a matar ni torturar a nadie. Eso la hace muy distinta a Pinochet. Habrá defenido a Marx y Fidel, pero ella no pasaba de defenderlos, es como tu defiendes a Dios aunque yo no crea en él, pero te respeto por eso. El duelo se lo merecía por la importancia política que tuvo a pesar de que muchos no pensaran como ella. Porque eso fue lo único que se le puede criticar. No haber pensado como uno. ¿O no? Pinochet no sólo no pensaba como muchos de nosotros, sino que trató a punta de fusil, cárcel y exilio, de que todos pensaramos como él lo hacía, y si no, ya sabías dónde podías irte. En el mejor de los casos, al extranjero, sino siempre estaba en Patio 29.

Finalmente, que el tema nos siga dividiendo tiene sus causas en que hay un número considerable de chilenos que no han podido darle cristiano entierro a sus deudos, hijos, esposos, padres, hermanos. Tomás, si tu hijo -aunque pensara distinto a ti- hubiera desaparecido en esa época por querer un país distinto (porque no sólo se asesinaron terroristas), ¿no hubieras dedicado tu vida a buscarlo y a saber la verdad? Por eso es aun una herida abierta. Porque hay muchas cosas pendientes. Porque uno ve por la calle a quienes torturaton y asesinaron a gente que sólo pecaba de pensar distinto. Por eso. Porque hay gente que aduciendo ceguera temporal participó de ese Gobierno, sabiendo -porque hasta yo que tenpia 10 años sabía- que se estaban cometiendo crímenes horrorosos. Porque hasta que no nos muramos todos los que sufrimos por alguna parte, esto será una herida abierta.

Ecco, abierta la discusión, si es que hay algo que discutir. Salud.

Etiquetas: nacional, política