REVELACIONES CHÚCARAS

Cada vez me convenzo más de una lamentable conclusión. Este país no tiene vuelta. Ayer me quedé boquiabierto con el doblete de noticias que venían desde nuestro Congreso Nacional.

En la primera parte, mostraban a un grupo de distendidos diputados tratando de hacer dominadas con una pelota de fútbol mientras los filmaban para un comercial del Canal del Fútbol (elmerculo). Todo esto no tendría tanta importancia si no fuera porque, a esa misma hora, se debatía en sala el proyecto que modifica al Ministerio de Defensa (emol). El hemiciclo lucía casi vacío. Consultado un honorable por la situación (Salaberry) se excusó diciendo que ellos son "personas" y que les gusta tanto el fútbol como hacer leyes. Bonito. Sólo que a ellos no se les paga por hacer comerciales de fútbol en horarios de trabajo, sino justamente para hacer leyes, cosa que -por lo demás- hacen bastante lento y mal.

La segunda patita de la nota era olímpica. Se hizo público de que hace tres semanas, la Comisión de Régimen Interno de la Cámara decidió aumentar el 100 mil pesos la asignación parlamentaria para bencina, debido al alza de los combustibles. Al menos, parece una medida impresentable. Claro que no hay ilegalidad ni tampoco irregularidad alguna en la asignación, sin embargo, no se justifica que una institución del Estado, pudiendo hacerlo, mejore sus condiciones debido a las circunstancias económicas con cargo al erario nacional (osea nuestros impuestos) mientras el ciudadano común y corriente no tienen ninguna posibilidad de mejorar sus condiciones de trabajo unilateralmente. Acá no se trata de si pueden o no hacerlo (emol), el tema es si es prudente hacerlo.

Nuestro Parlamento se anota una mancha más en su ya maculada imagen. Gente que parece vivir en otro planeta y que se desubica aumentándose sus privilegios al mismo tiempo que pierden el tiempo jugando a la pelotita en los jardines enrrejados de un Congreso que sólo da señales equívocas. Es de esperar que reconsideren (emol) y los que piensan que es justo y necesario y que renunciar a la asignación les perjudica económicamente, bueno, la puerta del Congreso es ancha y nos harían un gran favor a todos.

Escríbale a su diputado. Pregúntele por qué él sí se puede aumentar sus beneficios y si le parece moral hacerlo cuando todos estamos a duras penas tratando de echarle bencina al auto. Hágalo! - link - foto_robertogreco

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