REVELACIONES CHÚCARAS

Ésta no fue idea mía, así que no me hago responsable.

Mi buen amigo Daniel, sí el mismo que se caracteriza por sus genitalizados comentarios en esta bitácora, se nos casa. Y está en medio de ese tedioso y largo proceso de organización de evento aquel. Y como suele suceder, se vino el tema siempre conflictivo de la música. Tema no menor que muchas parejas suelen dejar en manos del Dj de turno que se remite a tomar el CD que luce con plumón un patudo "música de matrimonio", le pone play con el windows media de su computador y a tomar y comer, señores.

Pero Daniel quiere hacer las cosas distintas, claro si pasar a llevar a los (-------) de siempre que apenas se envalentonan a punta de roncola, comienzan a pedir las cumbias de rigor, el reaggeton, los clásicos ochenteros y cómo no, uno de Juan Luis Guerra.

¿Se puede variar? ¿Se podrá hacer algo distinto? Se ha escrito mucho sobre el tema (zancada), incluso acá mismo dediqué un par de párrafos en un post sobre matrimonios hace año y medio.

Daniel necesita ayuda y quiere que los selectos lectores de esta bitácora le colaboren para que el suyo sea una fiesta que al menos no guatee por la música (yo me encargaré de hacerles saber los detalles, no se preocupen), así que los que quieran y puedan, hagan sus recomendaciones musicales. Daniel ofrece una invitación con pareja para quien más colabore, aunque no me dijo si la invitación era para después de las 6 AM... como es él, no me extrañaría.

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