Huckabees es una corporación que acaba de hacerse de unos terrenos en los que pretende construir un mall. Sin embargo, no contaban con la astucia y perseverancia de Albert Markovski (
Jason Schwartzman), un activista y poeta que dio vida a la coalición ambientalista que pretende oponerse a que la ciénaga sea destruida.
Pero la ecología pasará a segundo plano en la vida de Albert cuando descubra que no puede seguir adelante sin desentrañar un encuentro triple, del que se niega a pensar que sea sólo una coincidencia.
Y como por arte de magia o el destino, da con la oficina de Bernard y Vivian Jaffe, unos excéntricos terapistas que aseguran poder develar la verdad de tu vida, solucionar todos tus problemas existenciales, y darte las técnicas reflexivas que te permitan tener una mejor vida. Porque las coincidencias no existen. El mundo es una gran manta blanca en la que todos estamos conectados produciendo efectos con nuestros actos y dichos urbi et orbe.
Los ejercicios introspectivos a los que es sometido Albert, comenzarán a mostrar todos esos sentimientos ocultos y reprimidos que tienen que ver con su trabajo, con sus ambiciones personales de figuración, con su necesidad de ser amado, y con una violencia y rabia guardada que parece querer explotar a cada momento.
Pero las técnicas de los Jaffe serán boicoteadas por una misteriosa mujer venida de la
Ciudad de la Luz, y que pretende echar por la borda todas las enseñanzas que Albert había interiorizado. Y parece tener éxito, a menos que lo inesperado suceda. Y bueno, se imaginarán el resto.
I Heart Huckabees (2004) es una película rara, confusa pero entretenida. Con mensajes subliminales a cargo de un elenco de actores y actrices memorable, que incluye a
Dustin Hoffman,
Isabelle Huppert,
Jude Law,
Naomi Watts,
Mark Wahlberg y
Lily Tomlin. Buena.
Trailer. Info en
IMDB. Está en
DVD.
Etiquetas: cine