El fin de semana vi "
V for Vendetta". Buenísima. Aluciné con la máscara. Supongo que revive mi sueño de infancia de ser un super héroe anónimo, con la labia y el poder de convencimiento para mover multitudes y cambiar el mundo.
Quién no ha pensado en tener un "trabajo" poco convencional de espía, agente secreto, super héroe, hasta sicario o ladrón de bancos (estilo
Ocean's Eleven, obvio. No los chantas de acá). Rescatar de las manos de unos pobres imbéciles a una chica tan linda como
Natalie Portman, a punta de cuchillazos y patadas de karate. Poner la
Obertura 1812 de Tchaikovsky y por mientras, mientras haces de director de orquesta, ver cómo un edifico símbolo de esa sociedad represora y dominada por la tiranía del poder económico y de las comunicaciones, explota por loa aires marcando el inicio de una nueva era. Donde la gente puede efectivamente sacarse las máscaras. Sólo un loco podría hacer todo eso, pero, repito, quién no ha querido ser loco en algún momento. Poder justificar todos nuestros actos por un arrebato de sed de justicia.
V es una película entretendísima, con los resabios de toda película de gente enmascarada versus los malos, con pinceladas del big brother de
1984 y tantos otros estereotipos que terminan un 5 de noviembre. Remember, remember.
Busco desesperadamente
la máscara de Guy Fawkes, si alguien la consigue, pago. Después necesitaré unos cuantos seguidores.
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