¿Es mi imaginación o la política chilena ha estado enfermamente fome estos días?
Que el informe del Transantiago, un gallito político de la derecha para poner en el papel lo que todos los chilenos hemos visto en la tele, escuchado en la radio y leído en el diario desde que se echó a andar el tema hace casi un año. Que las responsabilidades políticas de gente que lo menos que tiene es responsabilidad, que seguramente seguirán calentando asientos con cargos públicos.
Que el blindaje a Cortázar para que no se vaya. De perogrullo ¿cuál sería la idea de sacar al capitán del barco en pleno altamar? vendría otro que tardaría meses en "interiorizarse" del tema, encargar estudios, comisiones, etc, etc y la gente seguiría haciendo colas, caminando kilómetros, esperando horas y llegando a la casa a putear al que se le cruce por delante.
Que la interpelación a Francisco Vidal, un nuevo show que prepara la derecha, sólo para desprestigiarse más ellos y al Congreso con discursos llenos de payasadas que no le importan a nadie más que a los protagonistas del espectáculo.
Que Zaldivar y la DC. ¿A alguien podrá interesarle eso? Yo no entiendo cómo hay estómagos que aguanten pertenecer a partidos políticos donde la rasquería abunda, simplemente no lo sé.
El cansancio nos llegó a todos, tanto que ni los acostumbrados a calentar los ánimos están haciendo su pega. 2007 váyase para la casa, 2008 apure la causa, que se viene.
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