Me and You and Everyone We Know (2003) es una película femenina. Sensible, preocupada, a la que hay que prestarle atención, que repara en los detalles, a veces incomprendida, pero que si le tenemos paciencia, nos cautiva por su sencillez y profundidad.
Con varios premios a cuestas, esta película cuenta la historia de varios personajes que viven a su manera y en sus contextos esa tormentosa e ingenua búsqueda del amor. Sea si eres un niño que aparenta entender poco de lo que pasa a su alrededor, o una niña que vive pensando ansiosa en el futuro, o un par de adolescentes inseguras que compiten deseando siempre empatar; o sea un viejo que en los estertores de tu vida vienes a encontrar aquello para lo que estuviste preparándote toda tu vida, o una mujer sola y presa de la imagen que ella misma ha creado de sí misma, pero a quién la vida le dará una sorpresa que la bajará de sopetón a enfrentarse con quien es realmente.
Chistine (
Miranda July) es una linda artista en ciernes, que busca una oportunidad para expresarse y para amar. Como pasa demasiadas veces, su exceso de entusiasmo es mal interpretado lo que le significará tener que darse unas cuantas vueltas de más para lograr o no la respuesta que ella quiere. Ahí, esperando que suene ese celular que se ríe de uno mientras uno hace como que hace otras cosas (hay un
libro de aforismos de Hopenhayn increíble que describe esta situación), para que al otro lado de la línea alguien requiera un taxi o simplemente te diga
macaroni.
Trailer. Info en
IMDB. En
DVD.
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