No deja de llamarme la atención que hoy sea la derecha la que quiera controlar los precios de varios productos y servicios (incluso de algunos instrumentos financieros) pasándose por ahí mismito al dios mercado que lo regula todo (claro, cuando les conviene).
Que el dolar hay que intervenirlo, que el precio de las gasolinas hay que limitarlo, que los precios de las carreteras no pueden subir y ahora, un proyecto de ley para evitar que los precios de los pasajes de bus, suban durante los feriados. Control de precios, prácticas que tienen más olor a socialismo que a camisa a cuadros y chaleca con escote en V.
Las ironías de este paisaje llamado Chile. Al final, todos somos lo que somos y hemos sido, sólo hasta cuando no nos conviene. Ahí somos los reyes de las piruetas.