REVELACIONES CHÚCARAS

Lo he dicho varias veces, frente al tema del derecho de autor de música, libros y películas en internet, sólo tengo argumentos ideológicos que me ayudan a sentirme menos mal. Cultura libre versus industria o trabajo remunerado es un tema para largo. Lo que sí tengo claro, es que dentro de esos argumentos que sólo me sirven a mí y no me salvan de querella alguna, está que más tarde que temprano, los autores o titulares de derechos, se benefician de mí gracias a Emule. ¿Me explico?

Ayer me hice del tercer DVD original para completar mi trilogía anti-corporativa de documentales. Ayer finalmente llegó "The Corporation" a mi tienda de DVD's regalona. No me salió baratita considerando que en EE.UU lo que allá marca en dólares, acá lo traspasan a miles de pesos. Pero vale la pena. La Corporación expone y denuncia el mundo de las corporaciones transnacionales, su origen y su desarrollo, del que todos somos parte. Nos muestra cómo el capitalismo se nutre de los consumidores, no escatimando en medios y dónde la ética empresarial se resume en la frase del nóbel Milton Friedman "Asking a corporation to be socially responsible makes no more sense than asking a building to be". En fin. El documental de Jennifer Abbot y Mark Achbar se viene a sumar a "Enron: The Smartest Guys in the Room" y a "Super Size Me". El primero, recientemente nominado a los oscars como mejor documental, analiza el auge y desplome de una de las empresas más grandes y exitosas de EE.UU., la multinacional Enron, dedicada en un primer momento a la proporción de servicios energéticos y, al final, dedicada alevosamente a la especulación, los negocios fraudulentos y a dejar sin trabajo ni previsión a más de veinte mil trabajadores, mientras sus ejecutivos arrancaban con los bolsillos llenos de dinero. Por último, Super Size Me somete a Morgen Spurlock durante un mes a una dieta a base de la lista de productos que ofrece tu McDonald más cercano. Se interioriza en las consecuencias orgánicas y sicológicas que tiene el consumo cotidiano de McComida y, de paso, analiza la estrategia que Ronald utiliza para hacerse del estómago y cabeza de muchos niños alrededor del orbe.
Estos tres documentos audiovisuales, dificilmente hubieran llegado a mis ojos a no ser por Emule y su pandilla. Ahora con todos los derechos pagados están en mis manos y son parte de las clases que hago en una U privada acá (reproducción autorizada por el Art. 47 de la LPI). Hay que darle algún crédito a la vilipendiada solidaridad internauta, que hasta el momento sólo en Orsai he podido leer poéticamente, claro, con la ayuda de la pluma de Borges. Salud por ellos!