REVELACIONES CHÚCARAS

A ver, claramente el tema de estos últimos dos días ha sido la detención de la familia Pinochet y su círculo de confianza más cercano. El cargo es el de autores de malversación de caudales públicos y ha recaído sobre 23 personas, quienes han sido procesados (salvo Aitken, que no ha sido "habido").

He recibido aquí la interesante visita de Alberto y Juan Pablo que han comentado mi post acerca de la satisfacción que me producen los procesamientos de los Pinochet & Cia. Digo interesante, porque siempre me ha gustado el discenso, aunque no tenga mucho ánimo de consenso, pero creo que es el caso aclarar o contrargumentar algunas de las cosas que se han dicho acá.

La mejor excusa que han encontrados los aun partidarios de Pinochet y su familia, es la supuesta falta de imparcialidad del juez Cerda y que el procesamiento no sería sino una cortina de humo destinada a desviar la atención de los problemas que puede estar teniendo el Gobierno.

Sin duda que el premio que recibirá el juez Cerda por su defensa de los DD.HH. llega en un pésimo momento. Cada uno podrá tener sus opiniones acerca de si correspondía dicho premio o si era prudente recibirlo en estos momentos. Una y otra cosa no quita que la Justicia en un estado de derecho no puede impartirse condicionado o no a la entrega o postulación a premios, ni en cuando a la forma ni el fondo. El juez Cerda no postuló a ningún concurso de paladín de los DD.HH. El premio fue concedido por una fundación internacional y ahí queda el tema. Pensar que tras el procesamiento hay una venganza personal, una persecución política, ánimo de figuración o una estratagema del Gobierno, es simplemente tratar de tapar el sol con el dedo. - nota_emol

A raíz de una investigación del Congreso norteamericano y de manera absolutamente fortuita, se revelaron detalles de varias cuentas que había abierto Pinochet en EE.UU. y otros países, bajo diversas identidades; sus asesores habrían creado sociedades "de papel" con el objeto de administrar y hacer circular varios cientos de miles de dólares que no eran parte de sus ingresos como Presidente de la República; él y su familia utilizaron fondos públicos (la mayoría de ellos provenientes del ítem de gastos reservados de la Presidencia y del presupuesto de la "Casa Militar") para la adquisición de propiedades a nombre de miembros de los Pinochet, financiando ampliaciones y la compra de bienes, en cuya lista hay objetos francamente insólitos (bustos y otros cachibaches); finalmente con esas platas costeó la estadia de hijos del ex dictador en EE.UU., viajes y otros lujitos. Es decir, tal como platas del MOP y otros chanchullos de funcionarios públicos han ido a parar a bolsillos privados y a pagar los gastos de esos picantes, la familia Pinochet seguramente pensando que se trataba del justo pago por conducir los destinos de toda una nación, utilizó fondos públicos para costearse su vida privada. Ese es el punto de fondo acá. Los hechos.

El hecho de que acá haya un revanchismo de jueces picados, maquinaciones destinadas a perseguir al clan Pinochet, estrategias del comunismo internacional y una alianza secreta entre los ovnis y la Bachelet para revertir encuestas, son sólo especulaciones sin mayor fundamento que las ganas de no querer ver lo que ya ni los más fanáticos pueden rebatir.

Podremos no estar de acuerdo en el legado de Pinochet, pero acá toca que cada uno se haga cargo de lo que hizo. Si una familia de medio pelo o pelo y medio -como suelen ser las de los militares de rango medio- se transformaron de un día para otro en los patrones de Chile, haciendo y deshaciendo a piacere, actuando como unos verdaderos new riches que se dieron la vida de estrellas por años, pero lo hicieron con fondos que pertenecían al Estado, eso constituye delito hoy acreditado con bastantes antecedentes -entre ellos declaraciones de los mismos procesados-. No querer verlo es ser obtuso y traer a colación trapitos mezquinos como encuestas y otros complots es casi tan bajo como le hecho de que los Pinochet no fueron más que una de las tantas familias bananeras que con poder se dedicaron a gastar lo que no era de ellos, pensando que sólo por detentar ese poder podían salirse con la suya impunemente y nunca ser perseguidos.

Pues así no fue y ahora tendrán que pagar, ellos y los que cranearon todo. - foto_marcelo montecino

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