El tema es discutible y no soy el más calificado para hablar del tema ya que no conozco la cosa "por dentro" como otros, pero el olor a muerto es demasiado evidente como para no hacer nada al respecto.
El domingo pasado se realizó en el Municipal de Valparaíso una
sesión ampliada de socios del Wanderers para ver si pasaban o no a ser una sociedad anónimo o se mantenían como corporación, osea organización sin fin de lucro. La negativa a dar el paso societario fue tomado como una victoria de las tradiciones por sobre los intereses del mercado. Pero, ¿a qué está condenado el fútbol chilenos con clubes que funcionan como juntas de vecinos en un medio que se esfuerza por llamar a esta actividad deportiva profesional?
El fútbol es un negocio, dejó hace mucho de ser una actividad de amigos buenos para la pelota que no habiendo tele, preferían mover las piernas en la cancha de la esquina. Hoy se mueven millones de dólares en torno a esta actividad. Auspiciadores, medios, merchandising, en fin. Pero acá se quiere mantener este sistema del compadrazgo deportivo, donde sólo ganan los que están al mando de la institución mientras muchos jugadores no tienen con qué parar la olla en sus casas.
Si el fútbol chilenos quiere ser realmente profesional, debe dar pasos en esa dirección. Donde hayan responsables de las decisiones que toma el club. Y si el paso a nuevas figuras jurídicas y comerciales significa que algunos clubes tengan que desaparecer, eso iba a pasar tarde o temprano porque, como dije, el olor a muerto se siente hace rato. - foto_
mía.
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